domingo, 19 de julio de 2009

Un gran paso en la actividad

El Colegio Unico de Corredores Inmobiliarios de la Ciudad de Buenos Aires controlará el desempeño de los operadores inmobiliarios

El Colegio Unico de Corredores Inmobiliarios de la Ciudad de Buenos Aires (Cucicba) fue presentado oficialmente el miércoles último. El organismo se encargará de ejercer ahora el control de la matrícula de los inmobiliarios que ya suman 3800. Aquellos que no estén matriculados no podrán ejercer la actividad. Con la satisfacción del deber cumplido, los flamantes directivos Hugo Mennella, Roberto Ledo y Carlos Sotelo, presidente, vicepresidente primero y segundo respectivamente, brindaron por el logro de este nuevo paso que beneficiará a la sociedad, ya que la entidad deberá garantizar el buen desenvolvimiento de los operadores colegiados. En el acto realizado en el salón Gervasio Posadas, del Colegio de Escribanos de la Ciudad de Buenos Aires, tomaron posesión de sus cargos los directivos, muy comprometidos con este proyecto, que apoyó el GCBA, con la sanción de la ley 2340 de la Legislatura porteña.

“Somos un organismo público no estatal que ejercerá, entre otras funciones, el control del ejercicio profesional así como conceder, denegar, suspender, cancelar o rehabilitar la inscripción de los matriculados. Ante cualquier mala praxis está en juego la matrícula”, explica Mennella.

El vicepresidente Ledo reafirma el concepto: “Eramos uno de los pocos distritos sin un colegio y eso atentaba con la profesionalización y jerarquización de la actividad, que es hacia adonde se orienta el colegio. Esta es hoy una carrera universitaria. Se ha formado un tribunal de disciplina que cuenta con varios antecedentes y experiencia en la Cámara Inmobiliaria; ellos se encargarán de las sanciones, desde la amonestación hasta el retiro de la matrícula”.

El Cucicba está integrado por un consejo directivo, un tribunal de ética y disciplina, una comisión de fiscalización y cuentas, y una asamblea compuesta por 35 representantes de los 51 barrios porteños. Además se formarán comisiones de trabajo.

“Antes, el consumidor debía acudir a la justicia civil por cualquier inconveniente; hoy es el colegio el que actúa. Hasta el Cucicba todo estaba librado al arbitrio del que quería abrir una inmobiliaria con todos los riesgos que eso implicaba. El nuestro es el único colegio que se ha creado en esta ciudad en los últimos 20 años. La actividad inmobiliaria da lugar a permanentes inversiones”, expresa Sotelo.

“Formar el colegio exigió más de dos años junto con el tratamiento de la ley. Sólo se pueden matricular los que son universitarios en la carrera de Corredor y Martillero.

Hay más de 19 universidades que la ofrecen. Queremos ser un ejemplo de gestión, nada será improvisado”, destaca el flamante presidente. El único recurso económico con que contará el colegio será el cobro del derecho de matrícula de los operadores inmobiliarios, que será anual.

Juan Fernández Mugica

Fuente: La Nación – Sábado 18 de julio de 2009